3 abr 2011

Sin acritud

Hace muy poco, tuve una conversación "a tres" en Twitter en la que comentábamos de forma bastante informal y jovial el estado de la música, especialmente en Canarias. Para mi asombro, uno de los cantantes nombrados leyó los mensajes, no sé de qué forma (sí que la intuyo pero no quiero hacer sangre de eso), y pareció ofenderse, mandándonos posteriormente un mensaje pidiéndonos respeto. Por ello quiero dejarle por aquí una pequeña carta para, si él tiene a bien leerla, aclarar un poco lo acontecido:

Querido señor Benavente,
la verdad es que no tengo yo el gusto de conocerle personalmente, y sólo conozco, muy ligeramente su imagen pública, la cual, la verdad, no me agrada demasiado. Apenas conozco su obra musical, pero tengo más oídas de lo que quisiera sus canciones de "medio peso" y la del gallo ("polvorete" creo que se llama). Sinceramente puedo decirle que su música no me gusta en absoluto, me parecen totalmente trivial, tanto en letra como en música, cosa que no sé si es responsabilidad suya o es usted tan sólo un intérprete. Esto podría ser insignificante si usted simplemente cantara las canciones para el público que desea escucharlas, pero por desgracia no es así. No le culpo yo a usted de ello, ya que supongo que parte de su labor es intentar promocionarse lo más posible en todos lo medios posibles. El problema es que parece que la radiotelevisión canaria (una televisión pública de Canarias ¿para los canarios?) tiene una especial predilección por usted (mi más sincera enhorabuena) y prácticamente nos "obliga" a los canarios a escucharlo más de lo que nos gustaría. A pesar de todo eso no he pretendido en ningún momento ofenderle (ni yo ni ninguna de las otras personas que participaban en la conversación) ya que cuando sale usted por la televisión y yo no quiero escucharlo, no tengo más que hacer que cambiar de canal o simplemente apagar el televisor. Le sugiero que haga usted lo mismo. Si se siente incómodo con una conversación, como incómodo me siento yo cuando se pretende reflejar que en Canarias la música acaba en Pepe Benavente y las K-narias, deje de leer la conversación. Somos tres personas que coincidimos en que no nos gusta una determinada música (aparte de otras cosas) y tenemos total libertad para expresar nuestro disgusto con ella, sobretodo porque lo hemos hecho sin faltarle el respeto.
Espero que entienda usted que las opiniones son libres y no sólo se puede expresar uno para halagar.
Mucha suerte con todo.
Atentamente,

Un No-admirador

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